Para poder corregir, lo que se hizo mal, es bueno revisar lo que ocurrió en otras épocas. Por ello considero que es oportuno recordar algunos hechos similares a los que se están dando a conocer ahora.
Año 2009. Contrataciones directas. Un aspecto que ya estaba mostrando el abuso de poder. Desde esa época los organismos del Estado: Ministerios de Salud, Economía, Producción, Turismo, Infraestructura, Obras Públicas, Seros, etc. , han realizado innumerables contrataciones directas por montos elevados, sin necesidad de estar sometidos a controles. Esta situación habrían generado hechos de corrupción.
Se podía contratar en forma directa hasta $800.000, (más de 200.000 dólares) autorizados por ley, la cual fue promovida por el PE y aprobada a mediados del año 2009 por la totalidad del Bloque Justicialista y del PROVECH, (sumaron 21 votos a favor).
De nada sirvieron los argumentos presentados por mí y de algunos otros diputados de la oposición que nos opusimos firmemente, porque era descomunal el monto indicado en el Proyecto de Ley enviado por el PE. Como era de prever esta ley dio lugar a excesos de todo tipo, se realizaron obras o compras que no eran prioritarias, se pagaba por encima del valor real sin ningún tipo de control, etc.
Durante mi gestión como diputado provincial, denuncié en numerosas oportunidades estos hechos irregulares y/o ilegales, sin embargo, como se recordará, el Poder Legislativo, con 21 diputados incondicionales y un débil Poder Judicial, eran funcionales al Poder Ejecutivo. Tampoco los organismos de contralor cumplían con sus funciones. Los medios de comunicación, en su gran mayoría, informaban sólo las noticias favorables al gobierno. Y también hay que decirlo, contaban con la ayuda de una sociedad tolerante con los abusos y la corrupción.
En estos últimos años se ha podido observar que la mayoría de los funcionarios con poder de decisión han abusado de la autoridad pública que se les ha conferido para conseguir beneficios particulares, sin que hayan sufrido mayores sobresaltos.
Uno de los organismos que usaron cientos de veces contrataciones directas, fue el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV). Es así que su presidente, el Sr. GUSTAVO GARCÍA MORENO, desvió cifras millonarias para realizar obras, que precisamente no eran viviendas, en entes privados, clubes, sindicatos, asociaciones civiles. Se trataba de unos 250 obras aprobadas por dicho Instituto, sólo en el en el año 2009.
Se describe un caso representativo de cómo se usaba el poder público para beneficios personales o privados. Es así que se benefició a una entidad privada que tenía una estructura económica en la que se sostenía con holgura. Según se desprende del expediente respectivo, el 9 de septiembre de 2009, el ciudadano JORGE AIDAR BESTENE, en representación de la Asociación de Volantes Mar y Valle, solicita un subsidio para refaccionar el autódromo de Trelew, por un valor de $798.237 (obsérvese que con el monto solicitado se evadían los controles).
GARCÍA MORENO en un trámite brevísimo, cinco días después, aprueba lo solicitado, para ello se dicta la Resolución Nº: 2246/09, aclarando que la obra se puede realizar por “contratación directa”. Vale decir sin llamar a concurso de oferentes.
Pasaron 45 días cuando el Dr. BESTENE solicita un nuevo subsidio de $795.000 y otra vez GARCÍA MORENO lo autorizó tan rápido como la vez anterior.
El 9 de diciembre del mismo año, ingresa al IPV una solicitud de AIDAR BESTENE para la obtención de un nuevo subsidio, esta vez de $796.000, apenas dos días pasaron para que se dictara la Resolución 3101/09, por el cual aprueba lo peticionado y también se indica que la obra se puede realizar por contratación directa.
Y ahí no termina la cosa, ya que AIDAR BESTENE en el mismo mes, solicita un nuevo subsidio de $793.000, el cual también fue acordado a la brevedad por GARCÍA MORENO, para que se realizara con la misma modalidad, vale decir por contratación directa.
A esto hay que agregarle que en cada uno de los subsidios otorgados se solicitó ampliación, los cuales fueron autorizados sin objeción alguna en todas las oportunidades, sumando $538.369 más, monto este que también debió desembolsar el IPV, que con los $3.182.000 que ya habían sido entregados a través de los cuatro subsidios detallados , totalizaron $3.721.173.
Este es el monto que recibió la firma PÓRTICO SRL, por las 4 obras realizadas por “contratación directa”, en el periodo comprendido entre septiembre y diciembre de 2009 ¡¡¡Más de un millón de dólares!!!. (en esa época el dólar se cotizaba a $3,60).
Es indignante que al mismo tiempo que se ha estado derrochando dinero a mansalva, en los hospitales públicos se morían (literalmente) los pacientes, porque había déficit de insumos, medicamentos, reactivos para laboratorio, instrumentos para diagnóstico o tratamientos, etc.
Espero que haya pasado el tiempo del letargo, de la comodidad, y del mirar para otro lado. Ya era hora de que la sociedad chubutense se rebelara con coraje cívico.
Dr. Fernando Urbano.
Presidente Fundación FUSSO.
Año 2009. Contrataciones directas. Un aspecto que ya estaba mostrando el abuso de poder. Desde esa época los organismos del Estado: Ministerios de Salud, Economía, Producción, Turismo, Infraestructura, Obras Públicas, Seros, etc. , han realizado innumerables contrataciones directas por montos elevados, sin necesidad de estar sometidos a controles. Esta situación habrían generado hechos de corrupción.
Se podía contratar en forma directa hasta $800.000, (más de 200.000 dólares) autorizados por ley, la cual fue promovida por el PE y aprobada a mediados del año 2009 por la totalidad del Bloque Justicialista y del PROVECH, (sumaron 21 votos a favor).
De nada sirvieron los argumentos presentados por mí y de algunos otros diputados de la oposición que nos opusimos firmemente, porque era descomunal el monto indicado en el Proyecto de Ley enviado por el PE. Como era de prever esta ley dio lugar a excesos de todo tipo, se realizaron obras o compras que no eran prioritarias, se pagaba por encima del valor real sin ningún tipo de control, etc.
Durante mi gestión como diputado provincial, denuncié en numerosas oportunidades estos hechos irregulares y/o ilegales, sin embargo, como se recordará, el Poder Legislativo, con 21 diputados incondicionales y un débil Poder Judicial, eran funcionales al Poder Ejecutivo. Tampoco los organismos de contralor cumplían con sus funciones. Los medios de comunicación, en su gran mayoría, informaban sólo las noticias favorables al gobierno. Y también hay que decirlo, contaban con la ayuda de una sociedad tolerante con los abusos y la corrupción.
En estos últimos años se ha podido observar que la mayoría de los funcionarios con poder de decisión han abusado de la autoridad pública que se les ha conferido para conseguir beneficios particulares, sin que hayan sufrido mayores sobresaltos.
Uno de los organismos que usaron cientos de veces contrataciones directas, fue el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV). Es así que su presidente, el Sr. GUSTAVO GARCÍA MORENO, desvió cifras millonarias para realizar obras, que precisamente no eran viviendas, en entes privados, clubes, sindicatos, asociaciones civiles. Se trataba de unos 250 obras aprobadas por dicho Instituto, sólo en el en el año 2009.
Se describe un caso representativo de cómo se usaba el poder público para beneficios personales o privados. Es así que se benefició a una entidad privada que tenía una estructura económica en la que se sostenía con holgura. Según se desprende del expediente respectivo, el 9 de septiembre de 2009, el ciudadano JORGE AIDAR BESTENE, en representación de la Asociación de Volantes Mar y Valle, solicita un subsidio para refaccionar el autódromo de Trelew, por un valor de $798.237 (obsérvese que con el monto solicitado se evadían los controles).
GARCÍA MORENO en un trámite brevísimo, cinco días después, aprueba lo solicitado, para ello se dicta la Resolución Nº: 2246/09, aclarando que la obra se puede realizar por “contratación directa”. Vale decir sin llamar a concurso de oferentes.
Pasaron 45 días cuando el Dr. BESTENE solicita un nuevo subsidio de $795.000 y otra vez GARCÍA MORENO lo autorizó tan rápido como la vez anterior.
El 9 de diciembre del mismo año, ingresa al IPV una solicitud de AIDAR BESTENE para la obtención de un nuevo subsidio, esta vez de $796.000, apenas dos días pasaron para que se dictara la Resolución 3101/09, por el cual aprueba lo peticionado y también se indica que la obra se puede realizar por contratación directa.
Y ahí no termina la cosa, ya que AIDAR BESTENE en el mismo mes, solicita un nuevo subsidio de $793.000, el cual también fue acordado a la brevedad por GARCÍA MORENO, para que se realizara con la misma modalidad, vale decir por contratación directa.
A esto hay que agregarle que en cada uno de los subsidios otorgados se solicitó ampliación, los cuales fueron autorizados sin objeción alguna en todas las oportunidades, sumando $538.369 más, monto este que también debió desembolsar el IPV, que con los $3.182.000 que ya habían sido entregados a través de los cuatro subsidios detallados , totalizaron $3.721.173.
Este es el monto que recibió la firma PÓRTICO SRL, por las 4 obras realizadas por “contratación directa”, en el periodo comprendido entre septiembre y diciembre de 2009 ¡¡¡Más de un millón de dólares!!!. (en esa época el dólar se cotizaba a $3,60).
Es indignante que al mismo tiempo que se ha estado derrochando dinero a mansalva, en los hospitales públicos se morían (literalmente) los pacientes, porque había déficit de insumos, medicamentos, reactivos para laboratorio, instrumentos para diagnóstico o tratamientos, etc.
Espero que haya pasado el tiempo del letargo, de la comodidad, y del mirar para otro lado. Ya era hora de que la sociedad chubutense se rebelara con coraje cívico.
Dr. Fernando Urbano.
Presidente Fundación FUSSO.
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